La conciencia ambiental está cada vez más presente en nuestra sociedad y somos cada vez más quienes reflexionamos sobre el impacto de nuestras acciones. Tener un coche tiene una huella ambiental innegable, pero es posible reducirla siguiendo una serie de medidas. Una de ellas consiste en el recauchutado. ¿Quiere saber en qué consiste el recauchutado y cuáles son sus beneficios? Se lo contamos todo aquí.
¿Qué es el recauchutado?
El recauchutado es la sustitución de la banda de rodadura de un neumático frente a la sustitución del neumático en su totalidad. Es una técnica inventada hace años, pero que ha comenzado a cobrar fuerza en los últimos años.
El proceso de recauchutado consiste en raspar la banda de rodadura de un neumático desgastado, conservando solo la carcasa, para después acoplar una banda de rodadura de caucho nueva que queda adherida gracias a un proceso de vulcanizado.
¿Cómo se lleva a cabo el recauchutado?
Para poder recauchutar un neumático, es preciso empezar con un examen minucioso. Posteriormente, se elimina la banda de rodadura gastada del neumático con una rueda de pulido.
Una vez que el pulido ha sido completado, se usa un rebajador para eliminar las posibles imperfecciones. A continuación, se emplea un extrusor para adherir la nueva banda de rodadura al neumático.
Por último, se aplica caucho en polvo y se coloca el neumático en el molde que imprimirá el dibujo sobre la banda de rodadura gracias a la ayuda de una fuente de presión y calor.
Beneficios del recauchutado
El recauchutado es más sostenible, puesto que no compramos un producto nuevo y, por lo tanto, no contribuimos al uso de energía y materias primas extra. Esta técnica es más común en camiones y vehículos de grandes dimensiones que en coches utilitarios, puesto que los neumáticos de los primeros se desgastan más y pueden representar un alto coste de mantenimiento para una flota amplia de vehículos.
Las ventajas del recauchutado son muchas, pero vamos a hablar de las principales: reducción del impacto ambiental y ahorro económico.
Menor impacto ambiental
El ahorro de energía y recursos naturales para el proceso de recauchutado es evidente. Se reducen las emisiones de CO2, se consumen menos materias primas y se generan menos residuos. En total, se calcula que el impacto ambiental del recauchutado es entre un 50 y un 75 % menor que si se sustituyese el neumático desgastado por uno nuevo.
Ahorro económico
No podemos negar que sustituir solo la banda de rodadura de nuestros neumáticos es más económico que reemplazarlos por completo. De media, podemos ahorrarnos hasta un 60 % si optamos por el recauchutado de los neumáticos. Unos neumáticos nuevos de verano de primera calidad pueden salir unos 125 € cada uno, mientras que unos neumáticos recauchutados pueden costar aproximadamente 65 € por unidad.
Nuestro futuro depende de métodos más sostenibles. El recauchutado, así como el reciclaje de neumáticos, forma parte de los temas más debatidos en los últimos encuentros automovilísticos, así que es una técnica que estará en boca de todos y sobre la que ya conoce todos los secretos.