La dirección asistida nos ha salvado de más de una contractura. Desde que llegase en los años 50 y se extendiese a prácticamente todos los vehículos en los años 90, este sistema se ha convertido en uno de los imprescindibles en el mundo del motor. Si quiere mantener la dirección asistida de su coche funcionando a las mil maravillas, le dejamos aquí toda la información sobre el líquido de dirección asistida y su mantenimiento.
¿Para qué sirve el líquido de la dirección asistida?
El líquido de la dirección asistida, también conocido como aceite hidráulico, consiste en un fluido que lubrica el sistema hidráulico de la dirección asistida a través de una bomba. El líquido de la dirección asistida solo es necesario en coches que presenten una dirección asistida hidráulica o electrohidráulica, y no en direcciones asistidas eléctricas. Esta última precisa otro tipo de mantenimiento del que no hablaremos en este artículo.
El aceite hidráulico que sustituimos en nuestro coche debe estar homologado en base a unas especificaciones relativas a su viscosidad, punto de congelación, punto de inflamación, etc.
¿Qué tipo de líquido uso para mi coche?
Elegir un líquido de dirección asistida o otro depende de nuestro coche. Para saber cuál es el que corresponde al nuestro, debemos consultar el manual del vehículo.
En caso de que esta información no aparezca, comprobaremos el color del líquido de nuestra dirección asistida antes de decidirnos por un tipo u otro. En función de la marca de tu coche, el líquido podrá ser de alguno de estos tres colores:
- Verde: usado comúnmente por marcas como Ford, Bentley, BMW y Volvo;
- Amarillo: típico de los modelos de Mercedes Benz;
- Rojo: conocidos bajo el nombre de Dexron, son empleados por Toyota, Nissan, Hyundai, Kia o Mazda.
Líquidos de dirección asistida: mineral, sintético y semisintético
Hemos hablado brevemente del color del líquido de dirección asistida, pero una de las referencias más importantes a la hora de elegir nuestro líquido de dirección asistida es seguir las instrucciones del manual del fabricante siempre que estén disponibles, tal y como hemos explicado anteriormente. ¿Qué tipos de aceite existen? Los aceites mineral, sintético y semisintético.
Aceite mineral
Contiene fracciones de petróleo refinado y aditivos que mejoran su rendimiento. Como desventaja, hay que tener en cuenta que la vida útil de este tipo de aceite es corta y que suelen generar más espuma que otros tipos.
Aceite sintético
Contiene alcoholes polihidroxilados (poliéster) y fracciones de petróleo refinado. Su composición también incluye aditivos especiales que evitan que tanto gomas como tuberías de caucho se deterioren. Su precio es más elevado, pero el rendimiento es mucho mayor.
Aceite semisintético
Consiste en una mezcla de aceite mineral y sintético. Forma menos espuma que el aceite mineral y lubrica perfectamente los componentes mecánicos del sistema. Sin embargo, los elementos de goma y caucho se ven afectados por la acción de este tipo de aceite, llegando incluso a su destrucción.
Nota importante: la combinación de líquidos de dirección asistida de distinta naturaleza está contraindicada.